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Salas de los Infantes

La Ciudad Milenaria Salas de los Infantes, situada en el valle del Arlanza, presenta un casco urbano dividido por este río. Dista 56 kilómetros de Burgos a la que la une la N-234. Es la cabeza de un extenso partido judicial.

HISTORIA La ciudad fue fundada por el conde Garci Fernández y recibió fueros en el 974 por Gonzalo Gustios, señor de Lara ynci padre de los Siete Infantes. El título de ciudad fue concedido por Alfonso XIII en 1925. Salas, centro del comercio y los servicios de la vertiente sur de la Sierra de la Demanda, duplica su población en las temporadas vacacionales. Su dotación en tiendas y servicios es foco de atracción de los vecinos de todos los pueblos del entorno y se puede afirmar que esta tradición empresarial (antes fue sede de un muy nombrado mercado de ganado), ha entrado en el siglo XXI con verdadera pujanza. Cuenta además con destacadas empresas de la madera y la piedra en el Polígono de San Isidro. Con varias localidades vecinas (Castrillo, Hacinas,…), conserva una modalidad de ordenamiento territorial denominada «ledanías» que nos retrotrae a los primeros tiempos de la repoblación cristiana de la Edad Media.

POBLACIÓN Y DEMOGRAFÍA Salas de los Infantes es la población más grande de la Sierra de la Demanda, con cerca de 1896 habitantes censados en 2019 (sin contar entidades menores, con las que sumaría 1965)

A mediados del siglo XIX esta cifra era menor, con 984 habitantes. Durante los últimos años, la población ha aumentado gracias, en parte, a la llegada de emigrantes,

PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Salas es el centro de una comarca que, gracias a los trabajos de excavación e investigación del Colectivo Arqueológico Salense, se ha convertido en los últimos años en lugar de referencia en paleontología de dinosaurios. Además, las excavaciones arqueológicas han sacado a la luz interesantes hallazgos celtas y romanos. Todo ello puede contemplarse hoy día en un magnífico Museo que año a año va a aumentando sus atractivos gracias a las excavaciones que el CAS, en colaboración con distintas universidades españolas, lleva a cabo cada verano.

En la subida a la iglesia de Santa María se conservan varias tumbas antropomorfas altomedievales.

PATRIMONIO MONUMENTAL

El templo de Santa María, enclavado en el barrio del mismo nombre, fue erigido en sucesivas etapas dejando una profunda huella en su fábrica. La belleza arquitectónica de este representativo edificio es patente en las bóvedas de crucería con terceletes, del más puro estilo gótico isabelino (finales del siglo XV), con añadidos posteriores como la portada, la airosa torre o el baptisterio, hoy severamente alterado. Aquí se concitan soluciones constructivas medievales y elementos ornamentales renacentistas que testimonian una síntesis mágica y perfecta de formas y estilos.

Varada en el barrio de Costana, al otro lado del río Arlanza, la iglesia de Santa Cecilia se entretiene, coqueta y rotunda, en un exquisito sumario de corrientes artísticas, encerrando un patrimonio único pocas veces conocido. Gobernado por un crucero del siglo XVII, el atrio –en el que se reconstruyó recientemente un arco exento procedente del templo medieval del despoblado de Mazariegos- brinda el primer roce con el arte y la religiosidad.

Esta iglesia es un atractivo ejemplo de la arquitectura gótica burgalesa (siglo XV). Levantada sobre una fábrica del XII de la que aún quedan vestigios visibles –como la espadaña de triple tronera y remate en piñón- ostenta muros de sillería pétrea bien engarzada en los que se abre una portada con arquivoltas ligeramente apuntadas del último gótico castellano, en la transición al renacimiento, que permite el ingreso a la construcción.

FESTIVIDADES Y TRADICIONES Especial mención merecen las fiestas patronales de Nuestra Señora y San Roque, que se celebran con la participación de miles de vecinos y visitantes desde el 14 al 18 de agosto. También se celebra la Fiesta de la Matanza, la Semana Santa, o la Cabalgata de Reyes Magos.

NATURALEZA Y RUTAS. En Salas de los Infantes se puede visitar Peña Rota,  una excelente muestra del fenómeno eremítico en la Sierra de la Demanda entre los siglos VIII y XI. Más allá de su magnitud arqueológica, esta arquitectura troglodita –integrada por 13 cuevas artificiales excavadas en una gran roca de arenisca- sorprende por su función primigenia de centro religioso cristiano.

Desde este municipio se puede realizar la ruta Tierra de Dinosaurios, que se compone de una serie de yacimientos de icnitas (huellas fósiles) de dinosuarios que recorre Mambrillas de Lara (yacimiento la Pedraja), Salas de los Infantes (yacimientos de Costalomo y Museo de los Dinosarios) y Regumiel de la Sierra (yacimietno El Frontal) todos ellos declarados Bien de Interés Cultural.

Desde la localidad se puede realizar también la Ruta de Escipión al Castillo de Castrovido, la Ruta de las Calderas, ruta al cementerio de Sad Hill, al Monasterio de Alveinte , etc.

 

Actualmente, Salas de los Infantes integra como barrios propios a los pueblos de Castrovido, Terrazas, Arroyo de Salas y Hoyuelos de la Sierra.

 

Arroyo de Salas

Arroyo es actualmente un barrio de Salas de los Infantes, del que dista seis kilómetros.

Para llegar a Arroyo hay que tomar la carretera que une Salas con Nájera (C-113). Arroyo está rodeado de un extenso robledal. Desde la parte alta del pueblo, culminando la cuesta en una extensa superficie amesetada, se disfruta de magníficas vistas, tanto de las cumbres más altas de la Demanda, como de la Peña de Villanueva y la vega del Arlanza, con los restos del Castillo de Castrovido dominando la panorámica.

Un documento en escritura fechada en el año 1100 nos proporciona por vez primera el nombre de Arroyo, certificando –a juzgar por las noticias asiladas en el Fuero de Salas- la existencia de dos alcaldes en dicha localidad. Pero será durante la Edad Moderna (siglos XVI-XVIII) cuando se consolide su desarrollo gracias a los beneficios derivados del negocio lanero. Hoy en día Arroyo, con un número reducido de habitantes, tiene distintas explotaciones ganaderas, actividad tradicional entre sus vecinos.

 

Castrovido

Castrovido es una de las localidades con un pasado más genuino en la cuenca del Arlanza

El río Arlanza, que se debe atravesar por un encantador puentecillo de origen romano para acceder al pueblo, bordea el monte en cuya ladera se asienta el caserío rodeado de robles. No faltan en algunas casas de piedra uno de los elementos emblemáticos de la arquitectura popular serrana, la chimenea cónica. En la actualidad Castrovido es un barrio de la cercana Salas de los Infantes. Localizado a tan sólo 2’3 km.

La toponimia de este asentamiento deriva del nombre de D. Vito, compañero del señor de Salas, Gonzalo Gustios, a quien por encomienda del conde Garcí Fernández se le adjudicó la difícil tarea de repoblar estos pagos y salvaguardar a sus habitantes de las incursiones de castigo y devastación sarracenas.

La subida a la atalaya medieval ofrece el progresivo descubrimiento de un emplazamiento privilegiado. La ermita de la Virgen del Carmen, de recuerdos prerrománicos –con tumbas antropomorfas en sus proximidades-, nos sale al paso como testigo silencioso de una memorable antigüedad.

La torre fue construida durante el reinado de Alfonso III (866-910), coincidiendo con la prosperidad territorial del reino asturiano, para la defensa del Arlanza. Las irrupciones militares de Abd al-Rahman III y las más reiteradas y temidas de Almanzor debieron marcar negativamente a las gentes de la comarca. Con el avance de la Reconquista, la fortaleza iría perdiendo valor estratégico quedando abandonada.

La reconstrucción de la torre, que contó con la participación de alarifes mudéjares, fue promovida por don Pedro Fernández de Velasco en 1380, año en que funda mayorazgo en Salas a favor de su hijo Juan. Hoy el torreón, al que se puede acceder a su terraza del adarve circundada de almenas y aspilleras, se erige como un hito evocador que ha sabido resistir los embates del olvido y la destrucción.

Hoyuelos de la Sierra

Hoy barrio de Salas, esta pequeña localidad se encuentra camino entre la ciudad de los Infantes y Valdepez, en la C-113.

Las cumbres de la Demanda como telón de fondo y un extraordinario entorno natural distinguen a Hoyuelos, situado en un valle, visible una vez coronado el alto de Arroyo, viniendo de Salas. El pueblo aún conserva buenos ejemplos de construcción tradicional, con la piedra y la madera como elementos principales y alguna que otra chimenea encestada. Existe (hoy rehabilitado por iniciativa particular del salense José Ignacio Ruiz), un antiguo torreón defensivo, que estuvo -como todo en la comarca- bajo el dominio de la poderosa familia de los Velasco unos siglos atrás. La iglesia de San Esteban Protomártir presenta dos etapas en su construcción, visibles en la cabecera, y la nave con la torre, respectivamente. Destacan los cuatro capiteles románicos de su portada, que por su temática, composición y técnica, entroncan con la obra magna del claustro de Silos. También románica es la pila bautismal, que junto al retablo barroco, son los elementos más notables del interior del templo.

Terrazas

Terrazas es una de las cuatro pedanías que forman parte del municipio de Salas de los Infantes. Se encuentra a 62 kilómetros de Burgos capital.

La localidad de Terrazas se halla a 986 metros de altitud sobre el nivel del mar. Es una de las pedanías de Salas que presenta un rico patrimonio histórico artístico. El lugar nos transmite aún recuerdos vehementes de su pasado medieval, principalmente en su iglesia románica de Santa Eugenia,  La iglesia parroquial de Santa Eugenia constituye el hito más representativo de la localidad. Alberga un conjunto románico del siglo XII –portada y pila bautismal- adscrito a la Escuela de la Sierra de gran mérito tanto por la depurada técnica escultórica de influjo silense como por el indudable atractivo de su iconografía.

Antes de integrarse en el municipio de Salas de los Infantes, Terrazas presentaba en 1842 una población de derecho de 80 habitantes que vivían en 25 hogares. En el 2019, la localidad contaba con 8  habitantes censados.