A tres kilómetros de Hortigüela y diez de Salas de los Infantes, al cabo de la N-234 (Burgos-Sagunto) se encuentra Cascajares de la Sierra. A la sombra del impresionante farallón que es el monte Gayubar, parte de su término municipal pertenece al Parque Natural Sabinares del Arlanza.
Desde que se supo que el pueblo no quedaría anegado por las aguas del pantano, sus habitantes se han lanzado a la labor de recuperar sus viviendas y a la construcción de nuevas instalaciones.
PATRIMONIO MONUMENTAL La iglesia parroquial de Cascajares es, a juicio del doctor Félix Palomero, «uno de los restos arquitectónicos y escultóricos más importantes de la época medieval que quedan en la Sierra». La datación posible de la fábrica se sitúa en el siglo Xll. Hoy día, el edificio consta de tres naves, levantándose en la central una espadaña barroca. En el interior del templo, de base románica, se encuentra un retablo de principios del XVIII, adscrito al estilo barroco, que se sitúa en el muro norte. Enfrente existe otro pequeño retablo de madera policromada de factura anterior. Según Palomero, «el elemento más singular del mobiliario litúrgico es el retablo que cubre la capilla del ábside románico, conjunto tardogótico del siglo XVI con algunos elementos renacentistas. Presenta pinturas sobre tabla de varios apóstoles y de la vida de la Virgen (Nacimiento de Cristo, la Visitación y la Anunciación)».
DEMOGRAFÍA Cascajares de la Sierra tenía censados en 1857 la estimable cifra de 189 habitantes, en 2019 la cifra había descendido a 37.
TRADICIONES Y FESTIVIDADES Cascajares celebra las festividades de San Antonio en junio y de la Natividad, trasladadas éstas al último fin de semana de agosto. En las veraniegas se organiza una comida popular a la que están invitados propios y ajenos, en la que se degustan productos típicos. Durante las fiestas de la Natividad se celebra una interesante procesión.
NATURALEZA Y RUTAS Tres ríos atraviesan el término municipal de Cascajares. El emblemático Arlanza discurre al pie de la Cuesta y del Monte Gayubar. A él tributan sus aguas otros dos ríos que han seguido vidas separadas hasta confluir en Cascajares: el San Martín y el Salcedal. En el Arlanza se encuentra señalado uno de los mejores cotos trucheros de la región.
Tras dos kilómetros de camino se llega hasta el Valle de los Buitres, desde donde se atisba un paisaje impresionante. La extensa colonia de buitres leonados que tienen su morada en el monte Gayubar despliega sus alas en lo alto, oteando el extenso valle. Merece la pena la subida, que sólo queda vedada en la época de cría de los buitres. Parte del término municipal se encuentra protegido bajo la figura del Parque Natural de los Sabinares del Arlanza.